Este proyecto consistía en trabajar en un instituto alemán y las tareas que nos esperaban eran distintas para cada una dependiendo de nuestros intereses.
En mi caso, estas se centraron en apoyar a profesores con sus clases de inglés, español y arte. Puesto que ya tenía formación y experiencia como profesora de lenguas extranjeras, lo que realmente me llamaba de este proyecto era la posibilidad de mejorar mi alemán, cosa que llevaba mucho tiempo queriendo hacer pero no había tenido la oportunidad.
Además de ser siempre interesante poder ver la manera de enseñar que tienen otros docentes y así coger ideas para el futuro, así como aprender qué evitar para conseguir enseñar de la mejor forma.
Ahora que llega el fin de esta experiencia, estoy orgullosa de poder decir que he conseguido mi objetivo de mejorar mis destrezas en alemán y soy consciente de que mi progreso lingüístico no habría sido el mismo de no ser por la inmersión lingüística a la que he estado expuesta desde el primer día que llegué.
Asimismo, me llevo todas las amistades que he ganado durante este curso escolar: personas de diferentes procedencias que he conocido tanto por que hacen otros voluntariados o por que hemos coincidido en el curso de alemán. Esto proyecto, además, me ha dado la oportunidad de conocer el sistema educativo alemán de cerca.